Una de las opciones, a las que más se recurren, en el momento en que se engrosa las listas del paro, es decidir irse al extranjero, mientras, aún, se está percibiendo la ayuda por el desempleo. Muchos ciudadanos españoles, sobre todo, en el caso de los más jóvenes, se aprovechan para irse a mejorar su nivel de idiomas, se busca ampliar sus expectativas laborales. Pero, está práctica, según el régimen de sanciones de las prestaciones y subsidios de desempleo, está limitada por la restricción de salida a cualquier país extranjero a un máximo de 15 días de las personas, que estén en situación de paro. Por otro lado, deben avisar por escrito al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) de cualquier clase de desplazamiento, para poder continuar cobrando esta clase de prestaciones o de subsidios. Ante esta situación, el INEM SEPE ha decidido intensificar el control, a través del cruce con las bases de datos de la policía y el control de pasajeros a la hora de renovar el parao, para poder detectar desempleados que decidan abandonar el país, sin tener autorización. En caso de no cumplir, la sanción va a poder suponer desde un mes sin llegar a cobrar la prestación a la pérdida total de la ayuda y la obligación de devolver la cantidad de dinero, que se ha cobrado.
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